"En ocasiones, cuando nos perdemos en el miedo y la desesperación, en la rutina, en la constancia, en la desilusión y la tragedia,
habría que dar gracias a Dios por unas galletas glaseadas,
habría que dar gracias a Dios por unas galletas glaseadas,
incluso cuando no hay galletas,
aún nos puede reconfortar la caricia de una mano conocida acariciándonos, un gesto amable cariñoso,
aún nos puede reconfortar la caricia de una mano conocida acariciándonos, un gesto amable cariñoso,
un apoyo sutil para respirar la vida,
un abrazo tierno,
unas palabras de consuelo,
y no olvidemos las camillas de hospital y los tapones para la nariz,
la repostería que sobra y los secretos susurrados
las Fender Stratocaster y tal vez alguna que otra novela,
hay que tener en cuenta que todas estas cosas,
los matices, las anomalías, las sutilezas
que creemos que no son más que complementos en nuestras vidas,
de hecho estan presentes por una causa mucho mayor y más noble,
están para salvarnos la vida.
Sé que la idea es extraña, pero resulta ser la verdad."
Fragmento de la pelìcula:
Más extraño que la ficción
3 comentarios:
Es cierto, me ha encantado el texto y es tan cierto, a veces los detalles mas pequeños pueden hacer grandes diferencias.
Un beso Krizz y mis mejores deseos para este año que esta por comenzar
Valium & Chanel
Feliz año nuevo Kriss
Y que nos sigamos leyendo!!! ^^
Aw, amé esa peli
Sobretodo por esa parte del final.
Te quiero mucho nena.
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